Si has llegado hasta aquí, es muy posible que hace poco tiempo te encontrases con la desagradable sorpresa de sufrir un herpes genital.
Sin duda, un hecho indeseado y que te está provocando graves molestias tanto a nivel físico como psicológico.
Y es que, al picor y la quemazón que este mal origina, hay que añadir también que repercute muy negativamente a la hora de llevar una vida sexual normal y satisfactoria.
Sin embargo, no te preocupes.
Aquí voy a ofrecerte una serie de remedios completamente naturales que te serán de mucha ayuda para combatir el herpes genital que padeces y sanarlo por completo.
Te aseguro que funcionan.
Índice del artículo
Té verde para el herpes genital
El té verde es uno de los remedios más eficaces contra el herpes que he probado.
Esto se debe, fundamentalmente, a que, por un lado, tiene la capacidad de mejorar el sistema inmune de tu cuerpo, que es el principal responsable de evitar que la infección generada por el virus se expanda y siga afectándote.
Por otro, es muy útil a la hora de aliviar los síntomas, sobre todo el escozor.
Por estos motivos, mi consejo es que lo tomes por vía oral y lo apliques a la vez directamente sobre la zona.
Para ello, pon, en un cazo con dos tazas de agua hirviendo, unas cuantas hojas de té verde trituradas y déjalas 10 minutos para que libere todas sus propiedades.
A continuación, retira el recipiente del fuego y déjalo enfriar 5 minutos.
En este momento, bébete la mitad de la infusión y deja el resto reposar otros 20 minutos, es decir, hasta que se enfríe prácticamente por completo.
A continuación, utilizando un algodón o una gasa esterilizada, aplica el té verde directamente sobre las úlceras que te haya generado el herpes genital.
Notarás una formidable reducción de los síntomas de manera prácticamente inmediata.
Aceite de ricino para el herpes genital
Otro de los remedios naturales más efectivos contra el herpes genital y, a la vez, de los más desconocidos es el que ofrece el aceite de ricino.
En concreto, este elemento tiene la capacidad, al igual que el té verde, de reducir los síntomas y de atacar la raíz del problema, si bien es cierto que no tiene un gran impacto sobre el sistema inmune.
Por ello, aunque te recomiendo que lo pongas en práctica, has de saber que debes combinarlo con el resto de tratamientos que aquí te propongo.
La única manera de aprovechar las virtudes del aceite de ricino contra el herpes genital es aplicarlo directamente sobre la zona afectada.
Para ello, toma un trozo de tela grande, empápalo en este líquido y ponlo encima de las úlceras que padezcas.
Mi consejo es que pongas en práctica este tratamiento durante la noche.
De hecho, aplícalo justo antes de irte a dormir y deja que haga efecto mientras estás en la cama.
De este modo, cuando te levantes, el aceite de ricino habrá cumplido su cometido y los síntomas serán mucho menos palpables.
Aloe vera para el herpes genital
Creo firmemente que no hay ningún problema que se manifieste a través de la piel que no se pueda tratar usando aloe vera.
El aloe vera es una planta que también es conocida como sábila en muchos lugares y que se ha revelado como una de las más eficaces para el herpes genital y para otras muchas enfermedades cutáneas.
El aloe vera contiene, dentro de su composición, infinidad de sustancias bactericidas, por lo que sana rápidamente las infecciones que se han ocasionado en las úlceras que tienes en tu zona genital.
Además, favorece una pronta cicatrización y alivia los síntomas eficazmente.
Resulta muy sencillo aprovechar las virtudes de una planta como el aloe vera.
En concreto, basta con cortar una hoja de la planta y, a continuación, efectuar un corte transversal en ella para acceder a su sabia, la cual deberás retirar y colocar en un recipiente adecuado utilizando una cuchara.
Pon el jugo del aloe vera directamente sobre las heridas.
Sé perfectamente que, en cuanto entre en contacto con la piel, vas a sentir un poco de quemazón.
No pasa nada, es totalmente normal. De hecho, es positivo, ya que significa que las úlceras se están curando y la planta está haciendo efecto.
No hace falta que enjuagues la zona transcurrido un tiempo.
De hecho, al igual que te he explicado con el aceite de ricino, lo mejor es que dejes al aloe vera actuar durante la noche para que penetre hasta las capas más internas de la piel y pueda atacar directamente al virus que está provocando el herpes.
Té negro para el herpes genital
El té negro tiene, entre otras muchas virtudes, la capacidad de calmar los síntomas del herpes genital y, además, de desinflamar la zona afectada por este problema de salud.
Por lo tanto, se trata de un remedio natural enfocado también a aliviar los síntomas, lo que es de gran importancia.
Y es que, cuando tu cuerpo deja de experimentar dolor, escozor y picor, puede concentrarse mejor en acabar con la enfermedad subyacente.
Este tratamiento también es muy fácil de aplicar.
En concreto, basta con introducir una bolsa de té negro en agua tibia y dejarla ahí durante 10 o 15 minutos.
A continuación, ponla directamente sobre las llagas y úlceras que tengas en tu zona genital efectuando una ligera presión.
Lo mejor es que hagas esto dos veces al día para obtener resultados.
Estos cuatro remedios naturales que te acabo de explicar se han revelado como extraordinariamente eficaces a la hora de combatir el herpes genital.
Por ello, mi consejo es que, a partir de hoy mismo, empieces a ponerlos todos en práctica para notar resultados lo antes posible y poder llevar a cabo una vida completamente normal.
Sin embargo…
Lo mencionado aquí es MENOS del 2% de todo lo que debes hacer para curar el Herpes y eliminar los brotes para siempre
La clave – como ya mencioné en artículos anteriores – está en cambiar totalmente tu dieta.
Y es que además de añadir alimentos saludables, es sumamente importante que elimines aquellos que hacen más fuerte al virus. Y lamentablemente son muchos.
Pero no solo la dieta es importante. También existen otros importantes factores para curarse completamente del Herpes.
Esto lo digo por experiencia, ya que he sufrido largo tiempo las consecuencias desastrosas del Herpes.
Pero gracias al tratamiento natural que descubrí, he logrado eliminar al virus y los brotes que provoca.
Así, mi vida dio un giro de 180 grados y he vuelto a ser la misma persona de antes.
Si quieres saber cómo aplicar este tratamiento natural…
Nos vemos allí 🙂
Karen